Saludo al
Buda que hay en ti.
Puede que
no seas consciente de ello,
puede que
ni siquiera lo hayas soñado,
pero eres
perfecto y nadie puede ser otra cosa.
El estado
de Buda es el centro exacto de tu ser,
no es algo
que tiene que suceder en el futuro, ya ha sucedido.
Pero estás
profundamente dormido, no sabes quién eres.
No es que
tengas que convertirte en alguien,
únicamente
tienes que reconocerlo,
tienes que
volver a tu propia fuente,
tienes que
mirar dentro de ti mismo.
Permite
que tu corazón sepa que eres perfecto.
Ya sé que
puede parecer presuntuoso, puede parecer muy hipotético,
no puedes
confiar en ello totalmente. Es natural. Lo comprendo.
Pero
permite que esta idea se deposite en ti como una semilla,
y en torno
a ese hecho comenzarán a suceder muchas cosas y podrás comprender algunas
cosas.
Con esta
visión en la mente: que eres perfecto, que eres un Buda floreciendo,
nada
falta, todo está listo, sólo hay que poner las cosas en el orden correcto.
Lo único
que necesitas es un poco más de conciencia...
El tesoro
está ahí, tienes que traer una pequeña lámpara contigo.
Una vez
que la oscuridad desaparezca, dejarás de ser un mendigo, serás un Buda.
Serás un
soberano, un emperador. Todo el reino es para ti,
sólo
tienes que reclamarlo.
Pero claro,
no puedes reclamarlo si crees que eres un mendigo.
No puedes
reclamarlo, no puedes ni siquiera soñar con reclamarlo si te sientes un
mendigo.
Esta idea
de que eres un mendigo, de que eres ignorante, de que eres un pecador, ha sido
predicada desde tantos púlpitos a través de los tiempos que se ha convertido en
una profunda hipnosis en ti. Esta hipnosis debe ser desbaratada.
Y es
justamente para romperla que comienzo este saludo:
Saludo al
Buda que hay en ti.
Osho